Pueblo que renace, pueblo que se destaca, pueblo que se reune
FeaturedLa tarea de escribir un relato histórico es difícil, cuando imposible para un hombre que apenas tiene nociones elementales y sin estar debidamente documentado de datos escritos sobre nuestros antepasados; de allí el esfuerzo de buscarlos en las leyendas verbales de nuestros abuelos, de las versiones tradicionales que se apegan a la verdad histórica, y adquirir por otras fuentes de información escritas o verbales; pero un poco de verosímiles y paso a escribirlos como materia para la Historia del pueblo de COSOLTEPEC SANTA GERTRUDIS, de donde soy originario y al decir verdad, los datos que se narran sobre los primeros pobladores, se tomaron en el pueblo de San Juan Joluxtla, Oax., el día 20 de agosto de 1936, en cumplimiento de una comisión que yo representé acompañado con el Sr. Francisco Espinosa García, sobre datos etnológicos del pueblo y hoy se agregan otros datos más, con la súplica muy atenta de que todos los errores que se noten, sean perdonados por la nerviosidad de mis 71 años de edad. Y para aclarar mejor esos datos, transcribo el documento siguiente;-
“OFICIO No. 585.- COSOLTEPEC, HUAJUAPAN, OAX., A 14 DE AGOSTO DE 1936.- AL CIUDADANO GREGORIO LARA VEGA.- PRESENTE.- EL HONORABLE AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE LA LOCALIDAD, EN SU ACUERDO ORDNIARIO VERIFICADO EL DIA DE AYER 13 DEL PRESENTE MES, FUE USTED DESIGNADO PRESIDENTE DE LA COMISION INVESTIGADORA SOBRE DATOS ENTNOLOGICOS DEL PUEBLO; ESTE AYUNTAMIENTO AL RATIFICAR EL VOTO HACIA USTED, ES PORQUE ESTA EN LA PLENA SEGURIDAD QUE REVISTE CUALIDADES NECESARIAS PARA DESEMPEÑAR EL CITADO CARGO QUE SE LE CONFIERE.- POR LO EXPUESTO, SE LE PREVIENEA USTED PRESENTARSE ANTE ESTA PROPIA PRESIDENCIA MUNICIPAL A LAS 15 HORAS DEL DIA SABADO 15 DEL ACTUAL, PARA RECIBIR LOS UTILES NECESARIOS Y PROCEDER DESDE LUEGO EL TRABAJO INDICADO.- ATENTAMENTE.- SUFRAGIO EFECTIVO. NO REELECCION.- CARRETERAS Y ESCUELAS.- POR ORDEN DEL PRESIDENTE MUNICIPAL CIUDADANO MARCIAL LARA SANDOVAL.- EL SECRETARIO DEL AYUNTAMIENTO.- GONZALO AGUILAR.- Rúbrica.”
En la tarde del día sábado 15 de agosto, me presenté a la Presidencia Municipal con los señores Francisco Espinosa García y Aurelio Cruz Gutiérrez, para recibir papel y tinta, y acordamos reunirnos el martes 18 del mismo mes, con los señores Prudencio H. Martínez, Francisco Galicia Cortazar, Luis I. Olivares, Dionisio Martínez Lara y florentino Cortazar; miembros de la Comisión Investigadora que fueron nombrados en la misma fecha; previamente se nos dio un cuarto anexo al salón del Ayuntamiento para la oficina de nuestros trabajos preliminares.- Constituida la Comisión investigadora, se celebró la primera sesión en que se discutió cuál sería el primer paso del trabajo y después en un cambio de impresiones, todos opinaron de distintas maneras porque carecíamos de datos escritos o tradiciones verbales, aunque vagamente se decía que el origen de los primeros pobladores del pueblo, dependía del pueblo de San Juan Joluxtla, Oax., situado al Oriente de Santa Gertrudis como a seis kilómetros de distancia. Discutido el primer punto: - Fui nombrado con el Sr. Francisco Espinosa García, para ir al pueblo de San Juan Joluxtla a entrevistarse con aquellas autoridades y algunas persona de mayor edad, para ver si era posible obtener algunos datos y que al regreso de esa primera Comisión, se nombraría otra para ir a la Parroquia de Tequixtepec, Oax.- Nosotros los nombrados, nos trasladamos al pueblo de San Juan Joluxtla, llegamos por la mañana del día jueves 20 del mismo mes de agosto y nos presentamos con el debido respeto ante el Sr. Heleodoro Reyes, Agente Municipal, con la presencia del Juez Menor y otros empleados de la Agencia Municipal, perteneciente entonces al Municipio de Chazumba, Oax.- Les expusimos largamente el asunto que llevábamos y lo importante que era para nosotros encontrar algunos datos, sobre el origen de nuestros antepasados. Por la benevolencia de las autoridades, enseñaron sus archivos y que con cuanta tristeza vimos que ningún documento antiguo conservaban y solo nos enseñaron unos escritos relacionados a los ejidos recién creados en los años 1925 a 1930, y otros escritos de Administración Municipal, también recientes. Enterados nosotros que no había nada que hacer ahí, nos despedimos y les dimos las cumplidas gracias, e invitándoles a tomar un aguardiente que se expendía en la casa del Sr. Gregorio Hernández, (el azar del destino o de la suerte), allí estaban los señores Gregorio Hernández y Hermegildo Rosas, mayores de 50 y 60 años de edad, de reconocida solvencia moral y honradez por sus servicios públicos, es decir, han sido Autoridad del pueblo. Conversamos con ellos en presencia de los señores de la Autoridad, explayando nuestra comisión con pleno sentido de responsabilidad, nos oyeron con sumo interés y después el Sr. Gregorio Hernández dijo:- Que hacía unos catorce o quince años o sea los años 1919 a 1920, los ancianos don Doroteo Cruz y Ruperto Balbuena frecuentaban a la casa del Sr. Hernández, con pretexto de tomar sus copitas de aguardiente y se ponían a platicar y hacer remembranzas del paso, de sus habitantes y de las costumbres del pueblo de Joluxtla, y platicaban sobre el pueblo de Santa Gertrudis, lamentando con tristeza aquella trágica separación de los rancheros pudientes, que vivian diseminadamente en las laderas y cuchillas detrás del Cerro Cantón. Aquellos ancianos comentaban la historia, de cómo sucedieron los acontecimientos que dieron origen la fundación del pueblo de Santa Gertrudis y son los que transmitieron verbalmente con nosotros los de la Comisión, rectificando y afirmando cada parte de lo que uno y otro recordaban de que aquellas pláticas de los ancianos; y yo apunté todos esos detalles, porque eran de mucho valor histórico y son los que aparecen íntegramente en el primer capítulo de esta crónica.
El 21 de agosto, se reunieron todos los de la Comisión Investigadora, y ante ellos dimos extensamente todo lo que verbalmente nos contaron los señores Gregorio Hernández y Hermenegildo Rosas. Nuestros compañeros de la Comisión, aceptaron aquella versión histórica, porque algunos de ellos ya sabían algo de ese tema mucho antes, y también, porque la similitud de los de San Juan y los de Cosoltepec, son iguales en costumbres, el son de nuestro vocablo Mixteco, la manera de vestirse, su ocupación, su entidad de raza, que parece ser de una sola familia. Todos estuvieron de acuerdo que nuestros antepasados vinieron de las rancherías de San Juan. Terminada la sesión de ese día, se citó para otra reunión el martes 23 de agosto a las diez horas, se reanudaron las pláticas anteriores y se hicieron varios comentarios, al parecer, todos estábamos interesados en seguir buscando más datos para la formación de una Historia del pueblo; hubo distintas opiniones y debates sobre el mismo tema y por fín, llegamos a la siguiente conclusión:- Que cada quien debe escribir sus puntos de vista y presentarlo a la Comisión para su estudio, tácitamente aceptaron esta proposición del Sr. Prudencio H. Martínez y que él iba hacer su tema y presentarlo un poco después. Con esto se dio por terminada la sesión, retirándonos con la idea de que pronto volveríamos a reunirnos. Yo guarde mis apuntes y seguí buscando otros datos como otros señores del pueblo de San Juan, para que cuando se reuniera la Comisión lo presentaría. Pasaron varios meses, les recordé que nos reuniéramos luego, pero no volvieron, y así paso el tiempo y se disolvió la Comisión de Estudios Etnológicos, sin honor ni gloria.
Por lo que ignoro, si alguien escribió algunos datos históricos del pueblo; por lo que a mí me toca, el destino cambió mi ruta y me radiqué en la ciudad de México, D.F. desde el año de 1947 con mi familia; por eso hasta este año hago un resumen de lo que tengo escrito, con la finalidad de proporcionar una copia a todas las Organizaciones Sociales de Cosoltepecanos, establecidas en distintas ciudades:- México, D.F., Pueblo, Tehuacán y Huajuapan de León, a la Biblioteca de Cosoltepec, a mis familiares y a mis queridos paisanos intelectuales, que desean escribir la Historia del Pueblo.
Respetuosamente.
México, D.F. a 9 de abril de 1970.
Gregorio Lara Vega.
Rubrica.
Capítulo I
ORIGEN DEL PUEBLO DE COSOLTEPEC , OAX. Y SUS PRIMEROS POBLADORES.
“Los primeros pobladores vinieron de las rancherías del pueblo de San Juan Joluxtla, Oax. (En Mixteco se llama “Yute Yadin “ Río Delgado o Plano), que habitaban diseminadamente al Oriente del Río Cantón, y fueron separados o disgregados por los motivos siguientes: Las Autoridades del pueblo de San Juan Joluxtla, citaban a todos los rancheros para que den su tequio a las obras públicas y otros servicios de la población y no concurrían; se les llamaba para pagar su Capitación, que era un impuesto personal a todos los hombres adultos de los pueblos, para los gastos públicos del Gobierno del Estado y no iban puntualmente a pagar ese Impuesto; se les llamaba para otro asuntos locales y tampoco iban. Se ignora los motivos que les impulsó esta desobediencia; pero se tienen noticias que en un principio, cooperaron mucho para la formación del pueblo de Joluxtla, dado como se les llamaba Rancheros Pudientes, porque poseían toda clase de ganado:- Caballar, asnal, vacuno, cabrío, lanar y todo usaban caballo para transitar.
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Súbitamente muere el más rico de los rancheros que lo nombraban “MAHA” (seguramente se llamaba Román) y su esposa se llamaba GERTRUDIS; fue hondamente conmovida la noticia de la muerte de Maha, por una fiebre fulminante que en Mixteco le decía “Cuehe Dana.”
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Los rancheros al saber este infausto acontecimiento, se reunieron y se llevaron en camilla el cadáver al pueblo de San Juan Joluxtla, se presentaron ante las autoridades para manifestar con todo respeto la muerte de Román, pidiéndoles permiso para enterrarlo en el cementerio del pueblo. Las autoridades a su vez, no admitieron que se le sepultara, echándoles en cara que ellos no tenían derecho de pedir tal cosa, porque son desobedientes, que no habían cumplido las órdenes de las autoridades, que no han querido dar sus servicios personales que se les asignaba y otros argumentos más, se les decía a los rancheros que se llevaran a su muerto, porque de ninguna manera se les daba permiso para enterrarlo; entonces, Gertrudis llorando amargamente pidió perdón a las autoridades y desde luego ofreció cumplir todos los mandatos, pero que le permitieran a enterrar el cadáver de su esposo en el cementerio del pueblo; además, pidió que le hicieran sus cuentas, y ella estaba dispuesta a liquidar toda. Las autoridades con voz terminante le dijeron:- “Vete con tu muerto, no necesitamos tu dinero, no hay permiso para enterrarlo.” Gertrudis, al ver las inflexibles determinaciones de las autoridades, volvió a rogarles diciéndoles que ella pagaría cuanto quisieran, de igual forma lo hicieron sus compañeros rancheros, ofreciendo pagar íntegramente todo lo que debían y cumplir todas las disposiciones de las autoridades; tampoco se conmovieron con estos ofrecimientos privándose de dolor y de llanto, ordenó a su comitiva que volviera a cargar la camilla de “Maha” para su rancho, yasí lo hicieron, caminaron en la noche, pasaron el Río de San Juan hacia abajo para no ser vistos y se subieron al cerro de San Pablito hasta llegaren un portezuelo; allí enterraron al pobre e inmortal “Maha”, con los llantos más dolorosos de aquella tragedia, que no tiene comparación en la vida humana, por eso se le llama ese legar “DocoMaha”. Depués de la inhumación, acordaron celebrar una junta secreta en una noche de luna en la desembocadura de la barranquita del Ratón, o sea la barranquita que pasa al pie del cerro Cantón con el Río de San Juan Joluxtla, (por eso se le conoce a ese lugar “Río de la Junta”). En esa junta estuvieron todos los rancheros y con voz callada, temerosos de ser descubiertos por los vigilantes de las autoridades, trataron dos temas importantes:-
“YOHO CUAHA ÑUU”. (Aquí se formará el pueblo).“ÑUU CUITIA”. (Pueblo que nacerá).
“ÑUU CUIÑA”. (Pueblo que se acrecentará).
“ÑUU CUCANU”. (Pueblo que será grande).
“ÑUU CUHUN”. (Pueblo que se irá o emigrará).
Estas cinco palabras son proféticas: Porque se han cumplido todo su significado, a través del tiempo. También cuentan que el mismo anciano, mirando hacia el Oriente, echó maldición al pueblo anciano, mirando hacia el Oriente, echó maldición al pueblo de San Juan Joluxtla en estos términos:
“ÑUU NAA” (Pueblo que se extinguirá).
“ÑUU NDAVA”. (Pueblo que se acabará).
(El contexto de esas palabras significa igual o lo mismo).
Y como verdadera maldición los habitantes de Santa Gertrudis jamás dijeron que procedían de aquél pueblo de San Juan, y nunca tuvieron relaciones de amistad con esas gentes durante más de dos siglos; sino hasta que terminada la Revolución Mexicana de 1910 a 1917, empezaron las relaciones de amistad, sacando a colación que Santa Gertrudis es un pueblo grande y sus primeros habitantes fueron del pueblo de San Juan.
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En otra parte de los datos adquiridos, se sabe que Gertrudis mandó hacer una campana grande en Acatlán, Pue. Para obsequiarla a su pueblo de San Juan, porque lo amaba mucho y mandó a sus emisarios ante las autoridades para decirles que mandaron a traer esa campana para la iglesia de San Juan; pero las autoridades les dijeron que ni ellos ni el pueblo necesitaban la campana; entonces Gertrudis se vio obligada a presentarse ante las autoridades para suplicarles que aceptaran la campana y que mandaran a traerla. Aquellas autoridades, le dijeron que no necesitamos de tu campana, no aceptamos nada de ustedes, por más suplicas que ella hizo no le concedieron sus peticiones y llorando amargamente de su desventura regreso a su nuevo pueblo y les dio a conocer a sus compañeros el desprecio que le hicieron, y ordenó a los hombres que fueran a traer la campana inmediatamente y cuando la trajeron; la colocaron en un mezquite seco que estuvo en la ala derecha de la hoy iglesia de Santa Gertrudis.- (Hasta aquí las versiones verbales en idioma Mixteco de los señores Gregorio Hernández y Hermenegildo Rosas, tomados en el pueblo de San Juan el 20 de agosto (1936)).
Capítulo II
Cuando el anciano dijo: “YOHO CUAHA ÑUU” (aquí se formará el pueblo), pero no dijo cómo se llamaría. La razón lógica, es que le dieron el nombre de “SANTA GERTRUDIS”, en reconocimiento y respeto a Gertrudis, por ser la primera mujer que soportó las vejaciones de las autoridades de San Juan; cuando transida de dolor y de llanto, tuvo valor estoico; para ordenar a sus compañeros rancheros que se cargaran el cadáver de su esposo para regresar a su rancho y enterrarlo en el monte como se dijo atrás.
Cuando se fundó el pueblo, las gentes de los pueblos vecinos lo llamaban en lengua Mixteca: “ÑUU DOCOSHI” (Pueblo del Portezuelo). De aquellos acontecimientos, se afirma decir que se fundó un nuevo pueblo y una nueva vida a sus integrantes, con el sino de la religión católica, y conservando sus tradiciones, leyes o costumbres de la raza Mixteca (como se verá en otra parte de esta narración). Y siguiendo el curso de los acontecimientos, al referirse que Gertrudis compró la campana grande, seguramente, es la que está colocada en la torre de la iglesia de Santa Gertrudis y tiene la inscripción siguiente:- 1752 – S. DEUS – S. FORTIS – S. INMORTAL – MISERERE – NOVIS.- Otra campana mediana con esta inscripción: 1836 – JOSE – STA. MARIA . ORA PRONOVIS. Y otra campana chica o sea la que fue esquila y tiene la inscripción: - 1832 – JOSE – MARIA – STO. DEUS.
Estas tres campanas son el símbolo de la vida del pueblo, sus fiestas religiosas, sus anuncios de grandes acontecimientos y su doble tañido cuando uno de sus hijos muere y va a pagar su tributo al cementerio.
Aquí van dos interrogantes:- ¿Cuántos años transcurrieron que se separaron Gertrudis y los suyos para pensar en obsequiar esa campana grande a su pueblo de San Juan? No pudo haber sido luego de que salieron, porque los ánimos de unos y de otros estaban exaltados, debe haber sido un largo tiempo de ser cierto que Gertrudis compró la campana. ¿Cuántos años tenía ella cuando salió del pueblo de San Juna? Se hace una conjetura, que la señora Gertrudis tenía 20 años cuanto se disgregaron de la jurisdicción de San Juan Joluxtla, y fue en el año 1680 y cuando dispuso a obsequiar la campana al pueblo de San Juan, probablemente ya era anciana o quizás presentía la muerte, porque la fundición de la campana grande es de 1752, según la inscripción que tiene; entonces ella ya tenía 92 años de edad y se dice que fue muy respetada y distinguida, porque era la más rica y todos la obedecían y como coincidencia de los hechos por lo que contaron los ancianos Doroteo Cruz y Ruperto Balbuena del mismo pueblo de San Juan, en los años 1919 a 1920, de que por tradición verbal de sus abuelos cuando aquellos eran muchachos, vieron la disgregación de los rancheros y que hayan vivido 80 años, en tres generaciones de abuelos, hasta 1920 son 240 años iguales. Y cotejados cuando decimos que los rancheros salieron de la jurisdicción de Joluxtla en el año de 1680 a 1920 también son 240 años.
Aquí van otros datos para tener una idea aproximada en la época que se fundó el pueblo por ejemplo:- Don Jacinto de la Cruz y de los Ángeles, principal del pueblo de Santa Gertrudis, pidió y obtuvo el Despacho el 30 de julio de 1707 mil setecientos siete, del Presidente y Oidores de la Audiencia Real de la Nueva España y que textualmente dice:- Auto:- EN LA CIUDAD DE MEXICO A 30 TREINTA DIAS DEL MES DE JULIO DE MIL SETECIENTOS SIETE AÑOS 1707, LOS SEÑORES PRESIDENTE Y OIDORES DE LA AUDIENCIA REAL DE LA NUEVA ESPAÑA, HABIENDO VISTO LO PEDIDO POR PARTE DE DON JACIENTO DE LA CRUZ Y DE LOS ANGELES, CACIQUE PRINCIPAL DEL PUEBLO DE SANTA GERTRUDIS, DE LA JURISDICCION DE HUAJUAPAN, SE LE LIBRO DESPACHO PARA QUE EL ALCALDE MAYOR DE DICHO PARTIDO, PROCEDIESE CON CITACION DE LOS VECINOS A DARLE POSESION DE SUS TIERRAS.” Por lo que se cree, que sí se cumplió esta orden de mandamiento de la Real Audiencia, y que el Alcalde Mayor de Huajuapan, haya venido a dar posesión de las tierras de Santa Gertrudis por primera vez, porque por tradición, se sabe que el pueblo poseía su Título Primordial y esto lo daba la Real Audiencia de México, como una merced a los pueblos que no tenían tierras. Nuestros antepasados contaban que era un libro con pasta de badana pero se quemó cuando el incendio de la iglesia en 1915.
Otro argumento más cuando el testigo Don Domingo Hernández del pueblo de Acaquizapan, declaraba en las diligencias por otro Alcalde Mayor de Huajuapan el 25 de septiembre de 1760, que oyó decir de sus abuelos que la primitiva, hubo un Alcalde Mayor que se llamaba don Gregorio y su esposa Doña Gertrudis y éstos le habían dado posesión a los naturales de Santa Gertrudis, y que habían colocado la Virgen en la capilla del pueblo.
Nada difícil sería creer, que aquel Alcalde Mayor Don Gregorio y Doña Gertrudis, habían colocado la Virgen en la Capilla, pudo también después haber mandado a colocar un San Gregorio, como recuerdo de una Primera Autoridad que haya venido a dar posesión al pueblo de Santa Gertrudis; porque según la tradición, el pueblo tuvo dos Patrones y cuando se quemó la iglesia por un rayo meteoro en 1851, los vecinos sólo repusieron la imagen de la Virgen, menos la de San Gregorio, porque anteriormente se celebraba dos funciones religiosas el 16 y 17 de noviembre de cada año; y aún después, los mayordomos de las fiestas seguían celebrando la misa de San Gregorio, hasta el principio de este siglo. El Sr. Cura Don Antonio Cisneros, Párroco de Tequixtepec, cambió la misa de San Gregorio por la misa de la Hermandad de la Virgen.
Capítulo III
También se sabe que las campanas estuvieron colocadas en un torreón de madera con techo de palma en la parte superior del bautisterio, porque todavía no se cerraban las bóvedas, y al incendiarse la iglesia en 1851, las campanas se vinieron abajo; pero la campana chica o sea la esquila tuvo más deterioro y las otras dos perdieron sonoridad, porque la campana grande se le oía sus repiques desde el pueblo de Petlalcingo, Pue. Así lo contaban los abuelos. Los vecinos del pueblo, al ver esa pequeña desgracia, mandaron a componer la campana esquila y la transformaron como está hoy; después hicieron otro campanario rústico con soportes de gruesas maderas y amarres de cuero en las campanas y otra vez con techo de palma a veinte metros de la puerta de la iglesia en la ala derecha.
Otro incendio iba a sufrir la iglesia de Santa Gertrudis en 1883, estando en misa la gente, cuando remolineo un viento huracanado en el recinto sagrado y las velas de cera que estaban encendidas, levantaron llamas de fuego, quemándose algunos adornos del altar, y como había mucha gente, pronto pudieron sofocar la lumbre y algunos sufrieron leves quemaduras, como el caso del sacristán Don Damián Cortazar, sin mayores consecuencias.
Otro incendio más a la iglesia de Santa Gertrudis, acaecido a las once horas del día quince de mayo de 1915 que es la tercera vez de esta desgracia. Cuando ya estaba cerrada la iglesia, porque estuvo abierta en la mañana, por ser día de San Isidro, seguramente alguien de los mayordomos de los santos, que tenía la obligación de adornar flores y encender velas en los altares de las imágenes cada día de fiesta religiosa, dejaron encendida una vela y ésta fue la causa de haberse incendiado los manteles y adornos del altar y se extendió el fuego dentro de la iglesia, como ya estaba cerrada, las gentes no se dieron cuenta que se estaba quemándose adentro, sino que después cuando ya salía la humadera por las ventanas, la gente que vivía cercas, corrieron a romper la puerta de la iglesia, pero era demasiado tarde; allí se quemaron cuanto había y solo lograron a sacar las imágenes que se encontraban hacia la puerta, como la del Padre Jesús, la de San Miguel Chiquito y la de Animas que aún se guardan en la iglesia, y también la pequeña virgencita de Santa Gertrudis que está en nicho, se logró sacarla y es la segunda vez que se escapa del fuego, porque en 1851 cuando fue el primer incendio, se encontraba de visita en el pueblo de Tepeji de las Sedas por la hermandad de aquél lugar, y es la única reliquia de los antepasados que existe hasta hoy. No habiendo llegado el fuego, el Bautisterio y la Sacristía, porque la gente ya estaba en esos lugares.
Entre las muchas cosas que se quemaron, mencionaré algunas: Ornamento de vistosos colores, dos imágenes de la Virgen de Santa Gertrudis, una imagen de la Virgen de Guadalupe, la de La Paz, la del Carmen, la de Candelaria, las imágenes del Señor de la Esperanza, la de San Miguel Arcángel, la del Señor San José, la de San Isidro Labrador, todas esculturas grandes y otros objetos; como las cajas de cera de todas las cofradías en marquetas y labradas que sirvieron de combustión a elevar las llamadas del fuego hasta las naves del Coro, donde se hallaban instrumentos de la Banda de Música, de orquesta, un armonio grande y un gran repertorio de música sacra, clásica y popular; allí también se encontraban los Títulos Primordiales y las Escrituras de compra-venta y numerosos expedientes de posesión judicial y deslindes de las tierras de Cosoltepec, practicadas por las autoridades superiores de Huajuapan, en distintas épocas; esos documentos los tenían allí guardados las autoridades, por temor de ser robados durante la Revolución Armada iniciada en 1910 en todo el país y que tenía un valor considerable de muchos miles de pesos y un valor histórico local muy apreciable. Allí lloraron hombres y mujeres al ver ese cuadro de desgracia y desolación y la pérdida de tan grandes valores de las cosas quemadas. Y antes de dar fin al relato, quiero decir, que yo presencié este acontecimiento, oi crujir las ceras de instrumentos de latón en llamaradas que se levantaban a mitad de las naves de la iglesia, vi temblar a los hombres al acercarse a la lumbre con cántaros de agua para apagarla y entre esos hombres estaban el maestro Felix Olivares, Genaro Reyes, Eligio Rojas, Cirilo Navarrete y otros tantos jóvenes arriesgados, pasaron por la Sacristía y llegaron hasta cerca del altar mayor, sin medir peligro de las llamas del fuego, allí estuvieron recibiendo cántaros de agua que traían los vecinos desde el pozo azul, hasta que lograron sofocar totalmente el fuego; otras gentes por la puerta grande, echando agua y otras más subieron por los escalones del Coro y lograron sacar unos cuantos libros de la Cantoría, porque el fuego había llegado allí y les fue imposible sacar algo de más valor, esto se debió porque el Encargado de las llaves del Coro no estaba que lo era don Damián Amable, porque se había ido al campo y llegó cuando ya se había apagado la lumbre. Después los hombres removieron todos los escombros, pero no encontraron ni un vestigio de las reliquias de la Virgen de Santa Gertrudis, como era el Báculo Pastoral y la Diadema de pura plata maciza, y no faltando comentarios de las gentes, diciendo que la Virgen se volvió irse al cielo.
Cuando todo había terminado, la mayoría de las mujeres se encontraban hincadas de rodillas en el patio de la iglesia, rezando y llorando a gritos por tan infastuoso suceso y poco a poco se fueron retirándose para sus hogares por ser ya tarde, y entre los señores platicaban que lo destruido por el fuego ascendía a más de 100 mil pesos de valor.
Pasaron días y no se hizo ninguna investigación, ni a nadie le recayó la responsabilidad, siendo Presidente Municipal el Sr. Maximiano Moreno en ese año de 1915. En la feria del 15 de noviembre de ese año, no se celebró con pompa, porque la iglesia se encontraba muy averiada por el incendio, pero sí colocaron la Virgencita del nicho para celebrar misa; no hubo romería, porque ese año fue de extrema calamidad, no llovía, no había maíz, no se podía ir a trabajar en algún lugar, no había seguridad en los caminos, había robos por todos los lados y los revolucionarios saqueaban a los pueblos. A pesar de esa convulsión, los vecinos del pueblo pudieron replegarse y el Mayordomo de la Cofradía de Santa Gertrudis del año 15 el Sr. Anastacio Lara y su Segundo el Sr. Catalino Hernández. Reservaron una cantidad de dinero, y al siguiente año en 1916, previo consentimiento de la Autoridad Municipal, comisionaron a los señores Sebastián H. Rojas, Marcos García Olivares y Antonino Zárate Galindo, a comprar otra escultura grande de Santa Gertrudis en la ciudad de Puebla, en la casa del escultor Rovelo y para el 15 de noviembre del mismo año 16, fue bendecida con toda la solemnidad religiosa católica, por el Párroco delacabecera de Tequixtepec, el Presbítero Don Regino Bravo; ya para entonces la iglesia en su interior estaba renovada de las paredes* humareadas.
(*) se sustituye la palabra ilegible del texto original por la palabra paredes¨
De esa fecha en adelante los del pueblo no han comprado las cosas más importantes para la iglesia. ¿No pueden por la pobreza? ¿O han perdido la fé? ¿O hace falta un dirigente católico y entusiasta para el Encargado del Templo Católico?
Para resolver estos menesteres, el pueblo tiene la palabra para su conservación, lucimiento y recogimiento de los fieles a ese lugar Santo. Y para cerrar este tercer Capítulo diré: Que en el mes de abril de 1933, a la once horas del miércoles de la Semana Santa, se colocaron las tres campanas en el primer cuerpo de la torre que se está construyendo, y las repicaron con todo esplendor, y ya para el siguiente mes de mayo día 20, se inauguró la torre de la iglesia de Santa Gertrudis, con el entusiasmo y el regocijo más grande de los habitantes del pueblo. Siendo Don Ignacio Soriano García, Representante del Templo Católico que estaba a su cargo esta importante obra, con asesoramiento del Profr. Don Felix Olivares y don Luis Espinosa, miembros del H. Ayuntamiento y el Presidente Municipal, don Aurelio Cruz Gutiérrez. La fiesta de la inauguración hubo discursos alusivos, brindis, bailes y música, y los agradecimientos al ingenioso maestro albañil Epifanio Crespo de la Ciudad de Acatlán, Pue., que dirigió la construcción de la torre y su valor intrínseco era de $8,000.00, no haciendo cuenta de los cimientos y el cubo de la torre, porque estaban hechos por los antepasados.